viernes, 29 de abril de 2011

EL HONGO DE LAS HORMIGAS ZOMBIE



Los biólogos se sienten fascinados por algo que han descubierto en la selva amazónica de Brasil .Es uno de los ejemplos más llamativos, a la par que brutales, de parasitismo que se conocen, una espeluznante relación entre una hormiga y un hongo, que ha terminado desarrollando un comportamiento propio de película de terror.

El parasitismo es una interacción biológica entre organismos de diferentes especies, en la que una de ellas, el “huésped”, se ve perjudicado. La otra especie, el “parásito”, se beneficia de la relación lo que se traduce en que obtiene una mejora de su aptitud reproductiva, ampliando así su capacidad de supervivencia.En el caso que nos ocupa el parásito acaba incluso con la vida de su huésped.

Un grupo de entomólogos, liderados por David Hughes, de la Universidad Estatal de Pennsylvania, en Estados Unidos, ha encontrado en la jungla amazónica cuatro especies de hormigas carpinteras que son parasitadas cada una de ellas por una especie diferente de hongo, del género Ophiocordyceps unilateralis Hasta ahora todo normal. Lo increíble es que los hongos son capaces de provocar un cambio en el comportamiento de las hormigas que las induce a alejarse del hormiguero y morir en soledad. Los parásitos infectan el cerebro de las hormigas, alterando su sistema nervioso y adueñándose de su voluntad. El control de los hongos sobre las hormigas es tal que vulgarmente se conoce a estas últimas como “hormigas autómata o zombie”.




(clic en las imágenes para ampliar)




El parásito hace todo esto con el único propósito de favorecer la dispersión de sus esporas, una vez germinado. Pero ¿cómo lo hace? Cuando una espora del hongo cae sobre el insecto, desarrolla un órgano reproductor que comienza a crecer hacia dentro del cuerpo de la hormiga, devorándola por dentro. Al cabo de un tiempo, llegará al cerebro, provocando un cambio en su comportamiento. La hormiga enferma se alejará de su nido en los árboles y se sacrificará en soledad para, según se cree, evitar otras infecciones en la colonia.

El hongo “zombificador” comienza a crecer mientras la hormiga, aún viva, le alimenta sin que ésta pueda hacer nada. La hormiga se dirige, de forma automática, a una hoja del árbol situada a pocos centímetros del suelo. Una vez ahí, el insecto muerde con fuerza los nervios principales de la hoja, quedando anclada a ella, justo antes de morir. Es entonces cuando el parásito comienza a perforar la cabeza de su víctima y sale a la luz. El tallo del hongo madura y aumenta cada vez más de tamaño. Nos encontramos en la fase final de la infección. El tallo libera esporas que se transmiten por el aire para infectar a más hormigas, cerrando el ciclo.




El ardid es tan efectivo que se han observado casos en los que ha acabado con una colonia entera de hormigas. El único método de defensa por parte de los insectos es el de detectar a los individuos infectados, que son desterrados inmediatamente de la colonia.

Todo en la Naturaleza tiene una función, aunque a veces los procedimientos no sean del todo estéticos, por lo menos desde el punto de vista humano. Se cree que esta forma de parasitismo ayuda a mantener controlada la población de hormigas. Si no fuera por el hongo, probablemente se producirían pestes que acabarían extinguiendo las colonias de hormigas.




Para terminar, apuntar que esta siniestra relación entre hormiga y hongo no es de ahora. Parece ser que existe al menos desde hace 48 millones de años. Un grupo de paleobotánicos ha encontrado la evidencia en un fósil de una hoja de esa edad, que creció en lo que eran unos bosques subtropicales en el Valle del Rin (Alemania), y que muestra unas cicatrices muy parecidas a las que dejan las hormigas que tienen el parásito y que las convierte en "autómatas”.

LAS NEURONAS MARILYN Y JACKSON


Una interfaz cerebro-ordenador


Actividad de neuronas individuales



(Foto:Thomas Oertner)

La neurona Marilyn Monroe (clic para ampliar)

La neurona Michael Jackson (clic para ampliar)




Dos neurocientíficos de prestigio: Christof Koch y Itzhak Fried. Dos centros de investigación de renombre mundial: el Instituto de Tecnología de California, conocido también como “Caltech”, y la Universidad de California en Los Ángeles o “Ucla” Un descubrimiento de altura: observar el proceso de pensamiento como nunca antes se había hecho.

El cerebro nos permite imaginar, pensar, emocionarnos y recordar. Pero ¿cómo funciona nuestro órgano más asombroso? No hay día que no se produzcan avances científicos en su estudio.

Montarnos fantasías con el hipnotizante vaivén de caderas de Shakira o el físico arrebatador de Brad Pitt pueden parecer pensamientos triviales, pero los neurocientíficos han demostrado ahora que no son una frivolidad. Parece ser que las neuronas involucradas en esos pensamientos tienen un poder considerable. La razón es se ha descubierto que partes de nuestro cerebro se dedican con tanta intensidad a pensar en algo que nos interesa que incluso pueden recrear su imagen en un ordenador. Parece algo sacado de la ciencia ficción.

Con ayuda de una interfaz cerebro-computadora, desarrollada por los investigadores arriba citados, que no es otra cosa que un ordenador capaz de captar y procesar señales eléctricas mentales de una persona, un individuo puede utilizar esas frívolas neuronas para controlar un ordenador y manipular una imagen en la pantalla. Los científicos utilizaron imágenes de personajes populares como la actriz Marilyn Monroe y el cantante y bailarín Michael Jackson

Los doctores Kock y Fried descubrieron hace tiempo que una sola neurona en el cerebro puede funcionar como un equipo sofisticado y reconocer a las personas, movimientos y objetos. Ahora, ambos investigadores aseguran que cualquiera es capaz de poner en marcha neuronas ubicadas en una zona del cerebro que antes se creía inaccesible a la conciencia y, al hacerlo, manipular el comportamiento de una imagen en una pantalla de ordenador.

En el estudio se implantó quirúrgicamente unos electrodos dentro de los centros del cerebro de doce pacientes con epilepsia, enfermos que sufrían ataques que no podían ser controlados con medicación. Estos electrodos podrían registrar la actividad de las neuronas individuales en partes del lóbulo temporal medial, una región del cerebro que desempeña un importante papel en el reconocimiento de rostros y que regula emociones y motivaciones, como la ansiedad, el placer y la ira.

Con anterioridad se creó para cada paciente un conjunto de datos de alrededor de cien imágenes que reflejan las cosas que para ellos tenían importancia o eran de su gusto. Mientras los pacientes observaban las imágenes una tras otra, los investigadores monitorizaban su actividad cerebral para buscar la acción selectiva de una sola neurona.

De cien fotos, diez tuvieron una fuerte correlación con una neurona Esas imágenes tienden a ser recuerdos recientes. Las dos neuronas que respondían más intensamente, que representan dos imágenes concretas, fueron seleccionadas. Así, los pacientes pensaban en Marilyn Monroe y, al dispararse la actividad de sus neuronas, la imagen de la actriz aparecía en la pantalla de un ordenador. Pero los científicos quisieron llegar más lejos. Para distraer al paciente, que pensaba, por ejemplo, en Marilyn, introdujeron en la pantalla otra imagen, la de Michael Jackson, de forma que se veían los dos rostros al mismo tiempo. El voluntario tenía que hacer desaparecer la imagen de la pantalla que no le gustaba, en este caso la de Jackson, tan solo con su mente. Por increíble que parezca, los pacientes tuvieron éxito en un 70 por ciento de las ocasiones.

Estos experimentos demuestran, entre otras cosas, que las imágenes del cerebro funcionan con más fuerza que aquellas que vemos en una pantalla. Y también que podemos utilizar el pensamiento para alterar la percepción de imágenes visuales, de una forma rápida, consciente y voluntaria.

Todo esto podrá ayudar algún día a pacientes con trastornos neurológicos de una manera que hoy ni siquiera imaginamos.













lunes, 25 de abril de 2011

EL CEREBRO DE UNA MOSCA... POR DENTRO

Foto 1. Cabeza de una mosca ampliada por el
microscopio electrónico de barrido





Foto 2. -Escáner cerebral de la mosca de la fruta





Foto 3. - El cerebro de la Drosophila


(Clic para ampliar las imágenes)





Parece, a primera vista, un asunto trivial. Pero debe tener su importancia saber cómo es el cerebro de esos bichitos porque hay muchos científicos que están consagrando sus vidas a tratar de averiguarlo. Unos esfuerzos que, al parecer, ya han comenzado a dar sus frutos.

Un equipo de investigadores del Instituto Médico Howard Hughes, en Maryland (Estados Unidos), ha explorado el cerebro de la Drosophila melanogaster, también llamada mosca del vinagre o mosca de la fruta, mediante una nueva y revolucionaria técnica. El invento, conocido como “brainbow”, es una especie de escáner que permite auscultar al detalle cerebros diminutos, como el de una mosca, que contiene unas cien mil neuronas.

El insecto, en esencia, es manipulado genéticamente para que produzca una serie de proteínas fluorescentes, de diferentes colores, que se unen al tejido cerebral vivo, que resplandece y se hace claramente visible. De esta manera es posible identificar, individualizar y seguir el recorrido de las neuronas y sus múltiples fibras nerviosas llamadas axones. Hasta cien matices diferentes de color permiten distinguir el laberinto de redes neuronales de una forma que hasta ahora no se había conseguido nunca.. Es algo parecido a lo que ocurre con una impresora que mezcla el rojo, verde y azul para producir las demás gamas de color. Los creadores de esta técnica se inspiraron en el procedimiento de tinción de tejidos ideado por el médico italiano Camillo Golgi, por el cual obtuvo el Premio Nobel de Medicina, conjuntamente con el español Santiago Ramón y Cajal, en 1906.

Con el empleo de esta nueva técnica se ha podido averiguar, entre otras cosas, que las estructuras de procesamiento neuronal de la Drosophila son similares a los diseños de muchos ordenadores actuales. Además, los cerebros de hembras y machos tienen diferente tamaño. Este insecto, además, comparte con los humanos 6 neurotransmisores cerebrales, las sustancias químicas que transmiten información de una neurona a otra durante la propagación de los impulsos eléctricos.


Los expertos afirman que gracias a la técnica “brainbow” se podrá conocer con mayor profundidad la arquitectura de los circuitos cerebrales, lo que permitirá llevar a cabo estudios comparativos entre cerebros sanos y enfermos.


Foto 1 : Science

Foto 2 : Phuong Chungkin, Stefanie Hampel, y Julia H. Simpson

martes, 19 de abril de 2011

LA CÁPSULA DEL TIEMPO

Sir David Attenborough, uno de los


científicos divulgadores naturalistas
más conocidos de la televisión







Una pajera de ácaros copulando hace 40 millones de
años. La hembra, a la izquierda, posee una
diminuta almohadilla que le permitía
aferrarse al cuerpo de su compañero




(clic en la imágenes para ampliar)




Confieso que el ámbar siempre me ha fascinado. Esta resina embalsama todo lo que toca. Podemos pensar que el pasado se ha perdido para siempre. Sin embargo, el ámbar preserva los secretos de mundos perdidos en los abismos del tiempo

La resina, al escurrir sobre la corteza de troncos y ramas, llegó a atrapar burbujas de aire, gotas de agua, partículas de polvo o pequeños seres vivos como plantas y animales, que datan de hace decenas de millones y que van desde insectos, gusanos, hormigas, arañas, mosquitos, abejas, termitas, mariposas y libélulas hasta lagartijas y escorpiones Sus restos han llegado hasta nosotros prácticamente incólumes, conservándose incluso bacterias, material celular y hasta fragmentos de ADN. El ámbar es una cápsula del tiempo. Gracias a ella los científicos disponen de una gran cantidad de información de la vida remota, incluso de especies ya desaparecidas.

La noticia viene ahora. Los investigadores Pavel Klimov y Ekaterina Sidorchuk, del Museo de Zoología de la Universidad de Michigan, en Estados Unidos, tras examinar un trozo de ámbar del Báltico, de 40 millones de años de antigüedad, descubrieron algo sorprendente. En la resina aparecen dos ácaros pertenecientes a una especie ya extinta. Lo curioso no son los animales, sino lo que estaban haciendo, que no era otra cosa que apareándose. Cuando se encontraban en plena cópula, la pareja de ácaros fue sorprendida, no por una hembra, o un macho, rival, sino por una gota de resina que preservó el gozoso momento para la eternidad.

Pero lo más sobresaliente de este hallazgo, según los investigadores, no es la representación sexual en sí misma, sino la evidencia mostrada acerca del papel de cada cual en el apareamiento. Al parecer, los ácaros hembra de hace 40 millones de años decidían “dónde” y “cómo” gracias a una pequeña almohadilla, adosada en su parte trasera, que les permitía aferrarse al cuerpo de los machos y dirigir la cópula. Los machos, en cambio, carecían de la estructura especializada para aferrarse a las hembras Esto contrasta con el comportamiento reproductivo actual de muchas especies de ácaros en donde casi todos los aspectos del apareamiento son controlados por los machos.

Llevar el control sobre los asuntos de apareamiento implica obtener ventajas evolutivas. Por eso la batalla de los sexos no ha cesado ni un momento a lo largo de la dilatada historia de la vida en la Tierra.
































Fotos: BBC/E.Sidorchuk

ASÍ ES UN PARTO VISTO DESDE DENTRO




Un parto desde dentro, a través de una


resonancia magnética. En la espectacular imagen vemos al


bebé preparado para salir


(Foto: Charité/Universitatmedizin, Berlin)




Salida del bebé del útero materno




El recién nacido en brazos de su madre





Uno de los momentos cruciales del nacimiento humano es la culminación del embarazo,el periodo de salida del bebé del útero materno. Ahora ha podido contemplarse, por primera vez en la historia de la Obstetricia, el desarrollo consumado de un parto desde dentro del cuerpo de la mujer, instantes antes de cruzar el feto el umbral del útero


El acontecimiento tuvo lugar en el Hospital La Charité de Berlín, en Alemania. Gracias al equipo utilizado, una máquina de resonancia magnética especialmente preparada para la ocasión, que se abre como un sandwich, a diferencia de las habituales en forma de tubo, los médicos pudieron contemplar con exactitud todos los detalles de un proceso que antes sólo los profesionales podían conocer por la prospección táctil y el diagnóstico basado en la experiencia a ciegas sobre el desarrollo de lo que sucede dentro de la matriz.


"Las imágenes son espectaculares y vienen a probar una vez más que cada alumbramiento es un milagro de la vida", según Ernst Beinder, uno de los doctores que asistió al parto En las instantáneas todo el movimiento en el útero de la madre es claramente visible, así como la dilatación progresiva de la pelvis.

sábado, 16 de abril de 2011

¿POR QUÉ OCURRIÓ EL MEGATERREMOTO EN JAPÓN?

Foto 1.- Grabado del artista Hokusai, titulado La ola.

Los japoneses tienen una amplia experiencia con los

tsunamis, que azotan sus costas con frecuencia

Foto 2. - Registro sismográfico del terremoto de Japón

(Mcleans.ca)




Foto 3.- Miles de muertos y desaparecidos (Mcleans.ca)





Foto 4.- El archipiélago de Japón se asienta sobre

un polvorín de movimientos telúricos

sumamente destructivos

Foto 5.- La fosa de Japón, la fuente del

megaterremoto
Foto 6.- El megasismo se originó en el fondo del océano,

al este de la ciudad de Sendai
Foto 7.- Así se extendió el maremoto por el

Pacífico (NOAA)
Foto 8.- Olas gigantes arrasando la costa (BFM TV)
Foto 9.- El maremoto y sus consecuencias


Foto 10.- Mapa de la gravedad de la Tierra obtenido

por el satélite europeo Goce (ESA)
Foto 11.- Los terremotos crean "firmas" en los

datos de la gravedad de la Tierra (ESA)


(clic en las imágenes para ampliar)


Desde que los sismos comenzaron a medirse, estrictamente, solo a partir del siglo XX, el terremoto que el 11 de marzo pasado que azotó Japón pasará a la Historia como uno de los más importantes, y ha servido para recordar al ser humano, una vez más, la impotencia que éste tiene ante la Naturaleza. Luchar contra sus designios no es inútil, pero vencerla parece lejos de las posibilidades del hombre. La Ciencia, aunque avanza en sus investigaciones, es incapaz aún de predecir ni el epicentro ni la magnitud de los movimientos telúricos y poder adoptar así las medidas necesarias con antelación.


Sí se conocen, en cambio, las zonas de la Tierra más sísmicas, en un planeta muy inquieto en su dinámica interna desde sus orígenes. La litosfera o capa superficial de la Tierra sólida se caracterizada por su rigidez. Hay dos clases de litosfera: la oceánica y la continental. Cada una de ellas está fragmentada, como las piezas de un puzzle, en una serie de colosales placas rígidas que se desplazan, lenta pero inexorablemente, sobre el manto terrestre, que es más denso que la litosfera, por eso está debajo Como consecuencia de la dinámica interna, las placas chocan o se meten una debajo de otra. Las fuerzas desencadenas son tan colosales que pueden provocar terribles catástrofes. Ahí está lo dramático del asunto. Es en los bordes de esas placas donde se concentra prácticamente toda actividad sísmica y volcánica del mundo en que vivimos.


Existen placas oceánicas, bajo el mar, cubiertas íntegramente por litosfera oceánica, delgada, y placas mixtas, que son la mayoría, cubiertas en parte por litosfera continental y en parte por litosfera oceánica. El peor escenario de todos ocurre cuando una de las placas se deforma y dobla, con un ángulo pequeño, hacia el interior de la Tierra, introduciéndose por debajo de la otra. El límite viene marcado por la presencia de una fosa oceánica o abisal, una estrecha zanja cada uno de cuyos flancos pertenece a una placa distinta. Generalmente, es la litosfera oceánica, de mayor peso específico, la que se desliza bajo la litosfera continental, menos densa.


Las 1.042 islas que conforman el archipiélago de Japón se sitúan en una zona compleja, geológicamente hablando, a lo largo de cuatro placas tectónicas principales: la placa Norteamericana, la Euroasiática, la placa Pacífica y la placa de Filipinas (ver foto 4). Las dos primeras llevan litosfera con corteza continental y oceánica en superficie y las otras dos sólo tienen corteza oceánica. El archipiélago está situado exactamente junto al borde convergente de dos placas que se deslizan una debajo de otra. La zona de hundimiento de las placas ha originado una fosa oceánica, una profunda zanja conocida como fosa de Japón, que tiene una profundidad máxima de 9.000 metros y se encuentra situada al noreste del archipiélago (foto 6). La placa del Pacífico se mete debajo del archipiélago de Japón en la mencionada fosa, y se hunde en dirección oeste debajo de la placa Euroasiática.


El pasado 11 de marzo, la placa oceánica del Pacífico se desplazó en dirección oeste con respecto a la placa Norteamericana, desencadenándose la tragedia. En esa zona del fondo oceánico (foto 5) se generó un megasismo de magnitud 9,0, de dos minutos duración, que tuvo consecuencias dramáticas para la población nipona. El epicentro se ubicó frente a las costas del norte de Honshu, la isla principal del archipiélago japonés, 130 kilómetros al este de Sendai, la ciudad más castigada por el terremoto. Se le considera el quinto movimiento telúrico más fuerte jamás medido, en el que hasta la fecha han muerto más de 13.000 personas y otras 14.300 permanecen desaparecidas.


Se estima que el megaterremoto desplazó una sección de litosfera oceánica de 500 kilómetros de longitud por 100 kilómetros de ancho. Esa masa de litosfera se trasladó hasta 40 metros en algunos puntos de convergencia de las placas (normalmente la placa del Pacífico se mueve a una velocidad de 8 centímetros anuales).


Según cálculos de los expertos, la monstruosa cantidad de energía liberada por el megasismo fue similar a la explosión de 200 millones de toneladas de dinamita, o equivalente a la potencia desencadenada por 10.000 mil bombas – sin radiactividad - como la que fue arrojada sobre la ciudad de Hiroshima en la Segunda Guerra Mundial. Por efecto de las titánicas fuerzas desencadenadas, la isla de Honshu (alrededor del 60 por ciento del área total de Japón) se desplazó unos 2,4 metros, según muestran imágenes de satélite tomadas por la NASA, y los cálculos del Servicio Geológico de Estados Unidos. Hasta el eje de rotación de La Tierra se ha visto afectado.


La consecuencia inmediata del megaterromoto de Japón, al igual que en otros seísmos similares, fue la generación de un maremoto (tsunami) devastador, un grupo de olas de gran energía y gran tamaño. La Administración Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos mostró en imágenes cómo el maremoto se extendió por el Pacífico (foto 7). En ellas se aprecia el recorrido y la altura de las olas en su diabólico camino hacia las costas. Ningún rincón del Pacífico pudo salvarse, en mayor o menor medida, del impacto del maremoto. La mayor altura del grupo de olas se registró cerca del epicentro del terremoto, ante Japón. Luego fueron decreciendo a medida que se adentraban en el Pacífico, pero se hicieron más altas de nuevo al acercarse a áreas costeras.



Cada día se saben nuevos aspectos de la influencia del megasismo de Japón. Hay expertos que opinan que habrá modificado la forma de los océanos debido a que los terremotos de gran intensidad crean anomalías, o “firmas” características, en los datos de la gravedad de la Tierra. El satélite Goce, de la Agencia Espacial Europea (ESA), ha creado un mapa de la gravedad de la Tierra con una precisión sin precedentes (fotos 10 y 11). La forma de la Tierra, cuando se tiene en cuenta la gravedad, recuerda a una patata. Si el megaterremoto de Japón ha modificado la topografía oceánica global, esas anomalías habrán quedado reflejadas en los mapas de gravedad obtenidos por el satélite Goce.



En suma, nuevos conocimientos que podrían utilizarse para comprender mejor los procesos que conducen a estos desastres naturales y, en última instancia, ayudar a predecirlos para salvar vidas humanas.

jueves, 14 de abril de 2011

UNA NIÑA SUPERDOTADA SORPRENDE DESCUBRIENDO UNA SUPERNOVA

La pequeña Kathryn Gray, de 10 años, junto

al telescopio de su padre


La supernova descubierta por la niña

(Foto: David Lane/Abby Ridge Observatory)




La explosión de una supernova recreada

artísticamente




Lleva la Astronomía en la sangre. Detrás de ese rostro angelical se esconde una mente privilegiada. Y es que la pequeña Kathryn Aurora Gray ha sorprendido a todo el mundo El gran astrónomo alemán Johannes Kepler, figura clave en la revolución científica, tenía 33 años cuando hizo un descubrimiento semejante. La diferencia es que Kathryn tiene sólo diez años de edad.


La niña vive en la pequeña localidad de Fredericton, la capital de la provincia canadiense de New Brunswick. Su padre, Paul Gray, es un astrónomo aficionado que ha inculcado a su hija la pasión por el Universo. Pero ¿qué ha descubierto esta niña? Nada más y nada menos que una supernova, es decir, la explosión apocalíptica de una estrella antes de morir. La supernova hallada por Kathryn se encuentra en una galaxia, en la constelación de la Jirafa, situada a 240 millones de años luz de la Tierra Las observaciones fueron hechas por Paul Gray con un telescopio desde el Observatorio Abbey Ridge. El mérito de la pequeña consistió en darse cuenta de la presencia de la supernova en varias fotografías de la galaxia previamente captadas por su padre. Todos los años se descubren nuevas supernovas, principalmente por astrónomos aficionados. Kathryn se ha convertido así en la persona más joven que ha protagonizado esta clase de hallazgo.


Las explosiones de supernovas producen destellos de luz intensísimos, millones de veces más potentes que el de una estrella corriente, como el Sol, que pueden hacerse visibles desde cualquier rincón del Cosmos. Están producidos por astros de gran masa que han llegado al final de sus vidas como estrellas. Primero la estrella moribunda se hincha espectacularmente, luego se hunde sobre sí misma y, finalmente, salta hecha añicos, expulsando violentamente su infernal atmósfera hacia el Espacio. Ha nacido una nebulosa, el fantasma de la estrella muerta. La parte de la estrella colapsada termina convirtiéndose en algún tipo de cadáver estelar, bien en una estrella de neutrones o en un agujero negro.


Pero no hablemos más de muerte, sino de vida, que es la que tiene, y mucha, por delante, la protagonista de esta historia. Y un futuro muy prometedor desentrañando los secretos del Universo. ¡Enhorabuena Kathryn, y mucha suerte!

miércoles, 13 de abril de 2011

ONDAS SÍSMICAS Y RAÍLES DOBLADOS


(clic para ampliar)



El 4 de septiembre de 2010 se produjo un curioso fenómeno en la Isla Sur de Nueva Zelanda. Un tramo de la vía de ferrocarril, cerca de la ciudad de Rolleston, apareció ostensiblemente deformado. Los raíles de acero aparecieron doblados como si fueran de goma y hubieran sido arqueados por una gigantesca mano invisible. Acababa de producirse un terremoto de magnitud 7,0 en la escala de Richter, que afectó la región de Canterbury y especialmente Christchurch, la segunda ciudad más grande del país. El epicentro estuvo localizado a unos 55 kilómetros al noroeste de la ciudad, a una profundidad de doce kilómetros.


Al parecer, la deformación de los raíles ocurrió en tramos de la vía que cruzaban justo por encima de la falla geológica, a lo largo de la cual se concentra la actividad sísmica. La línea de falla se se halla cerca de Rolleston, una localidad situada a sólo un kilómetro de Christchurch, la población más afectada por el sismo.


No hay un metro cuadrado del globo terráqueo que no tiemble al cabo de un año. La mayoría de las veces estas sacudidas pasan desapercibidas, afoertunadamente. Todo depende de la localización del epicentro, el punto en la superficie de la Tierra que está directamente encima del foco sísmico, que puede hallarse a cientos de kilómetros o a poca distancia de la superficie. Cuando sucede esto último, la tierra se agrieta, cede, se hunde, cambia su orografía.


La energía de los temblores telúricos se desplaza en forma de ondas. Unas comprimen y expanden la roca. Otras se desplazan a través de la roca, sacudiéndola de arriba abajo o de lado a lado. Y hay ondas de superficie, que provocan un movimiento de lado a lado y otro de oscilación.


Observando las imágenes podemos comprobar cómo los raíles muestran altos niveles de deformación producidos por las ondas sísmicas, mientras que la alteración que el terreno circundante muestra es relativamente pequeña.

Fotos: Malcolm Teasdale/Marty Melville

CREAN RETINAS EN EL LABORATORIO

Retina de ratón obtenida por investigadores japoneses

(Foto: Yoshiki Sasai)



Basta con crear las propiedades de cultivo más adecuadas para que un grupo de las conocidas como “células madre embrionarias” se transformen espontáneamente en el laboratorio en algo tan complejo como una retina, un tejido sensible a la luz situado en la superficie interior del ojo. Las células madre embrionarias (pluripotentes) se encuentran en la masa celular interna del blastocisto, una fase de las etapas tempranas del desarrollo embrionario. Estas células tienen la capacidad de diferenciarse en todos los tipos celulares que aparecen en el organismo adulto, dando lugar a los tejidos y órganos

Este paso esperanzador, que podría ayudar a curar algunos tipos de ceguera en el futuro, es obra de un grupo de investigadores japoneses, que lo han conseguido a partir de células madre extraídas de embriones de ratón. Las células se transformaron en el nuevo tejido y se organizaron ellas mismas hasta reproducir la estructura de la retina.

martes, 12 de abril de 2011

SOBRE GIGAFOTOS, GAROTAS DE IPANEMA Y RETINAS SINTÉTICAS

La Cidade Maravillosa y su paradisíaco entorno






Pedro Sander





Con 152 gigapíxeles, la panorámica completa





En la gigafotografía de Rio de Janeiro, desde el Pan de

Azúcar, se aprecian detalles que todos quieren ver





(clic en todas las imágenes para ampliar)



En noviembre pasado estuve en Río de Janeiro. Allí quedé extasiado admirando uno de los parajes, deslumbrantes de belleza, más fascinantes de la Tierra. Me refiero a una escultura monumental, llamada “Cristo Redentor”, y su paradisíaco entorno. Ambos, en un impecable maridaje, la obra maestra del hombre y la joya forjada por los poderes de la Naturaleza, forman parte de una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo. Por algo será.

Desde la cima del cerro del Corcovado la visión del paisaje es indescriptible. Al pie del Cristo Redentor, se abre la Cidade Maravillosa, su bahía incomparable, su exuberante floresta, sus espectaculares colinas y sus playas ya legendarias, tan lindas y llenas de gracia como la garota de Ipanema (“Olha que coisa mais linda, mais cheia de graça…”).

Pedro Sander, un investigador de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong, ha fotografiado esas vistas de ensueño, pero no como un turista más. Lo ha hecho provisto de una cámara digital dotada del sistema Gigapan (ver www.gigapan.org), la tecnología fotográfica de moda. Él y sus colegas del grupo Río-HK han conseguido obtener la segunda foto digital de mayor resolución realizada hasta la fecha (solo e superada por una panorámica de la ciudad de Sahghai, de 272 gigapíxeles, sobre la que ya informábamos en este mismo blog hace unos días). Las imágenes panorámicas de Río fueron captadas desde el Corcovado y el Pan de Azúcar.

La panorámica de Río desde el Pan de Azúcar tiene una resolución (el detalle o calidad visual) de 152,4 gigapixeles, es decir, es un “monstruo” de fotografía de 871.708 x 174.838 pixeles. Está compuesta por 12.238 instantáneas individuales diferentes que fueron registradas por un dispositivo robotizado durante casi cinco horas. A través de un software GigaPan, en ocho días de trabajo, se consiguió unirlas todas en una sola imagen panorámica que se puede ver en el enlace www.rio.hk en todo su esplendor. La capacidad de zoom permite acercarse a los puntos más lejanos de la gigafoto sin perder prácticamente calidad. Se pueden apreciar los detalles del día a día de la urbe carioca hasta lo que todos quieren ver: una garota en Copacabana.
¿No sería maravilloso poder ver así? A mi me encantaría, teniendo en cuenta que veo menos que un gato de escayola. Es `probable que algún día los deficientes visuales, y los que no lo sean, por qué no, puedan recibir algún tipo de injerto artificial electrónico, derivado de los progresos de la fotografía digital, que les permita ver con una agudeza visual asombrosa,

Mientras llega ese día, hay otros avances que podrían revolucionar el tratamiento de las enfermedades oculares graves, como las que afectan a la retina. Recientemente, un equipo de investigadores japoneses, dirigido por Yoshiki Sasai, del Centro Riken de Biología del Desarrollo, en Kobe, halogrado transformar espontáneamente, en cultivos de laboratorio, células madre embrionarias, extraídas de embriones de ratón, en células de la retina, la estructura del ojo más compleja.

La mayor sorpresa para los investigadores fue comprobar cómo las células de la retina se organizaron en una estructura de capas tridimensional que recordaba la cuenca óptica, tanto en su forma como en su composición. Si el experimento se pudiera reproducir con éxito en humanos, serviría para trasplantar retinas sintéticas completas, entre otros tratamientos.

























viernes, 8 de abril de 2011

EL VOLCÁN MÁS EXTRAÑO DE LA TIERRA

En un remoto rincón de Tanzania, al sur del lago Natrón, se eleva una asombrosa montaña volcánica, de 370.000 años de antigüedad, llamada “Ol Doinyo Lengai”, que es lugar de peregrinaje para el pueblo masái, quien la considera hogar de “Eng’ai”, su única divinidad, la «montaña del Dios». Su lava es la más fluida del mundo, y también la más fría, con temperaturas de sólo 590 grados centígrados. Esa lava fluye negra en el día, arde con un rojo intenso en la noche, y se torna blanca al entrar en contacto con el agua. Lo más espectacular de todo es que las fuentes de lava se solidifican en el aire como si fueran alas de piedra para luego, en pocas horas, hacerse añicos como el cristal, un fenómeno que ha sido captado por los fotógrafos Carsten Peter y Tineke Speelman. Frágiles como castillos de arena e igual de efímeras, estas insólitas formaciones son el resultado de las únicas coladas de carbonatita sódica que se conocen.

NUESTROS OLVIDADOS ANTEPASADOS SALEN DE LA OSCURIDAD




Nuestras historias familiares tienen un alcance tan corto que apenas sabemos algo de nuestros tatarabuelos y nada si nos remontamos a la quinta generación, la de nuestros trastatarabuelos. Estamos aislados de nuestro pasado por la brevedad de nuestras vidas y por los insondables abismos de tiempo que nos separan de nuestros orígenes. Y sin embargo, cien mil generaciones atrás nuestros ancestros eran aún reconociblemente humanos. La inmensa mayoría de ellos son simples fantasmas. No tienen nombres, ni rostros…


Elisabeth Daynes es una prestigiosa escultora francesa que ha querido satisfacer nuestra curiosidad por saber qué aspecto tuvieron, en realidad, algunos de los principales protagonistas de nuestra historia evolutiva. A partir de los fósiles de huesos, ha creado extraordinarias reconstrucciones de los seres, a tamaño natural, que nos han hecho como somos y que vivieron hace miles e incluso millones de años atrás. El trabajo de Daynès combina investigación científica, innovación tecnológica y grandes dosis artísticas para obtener unas figuras con un realismo que casi asusta, que parecen devolver de nuevo a la vida a nuestros predecesores olvidados. Las réplicas son tan fidedignas que están presentes en museos de todo el mundo. Y ahora, por fin, podemos mirarles a los ojos y reconocerlos. El resultado es asombroso. En su momento fueron tan reales como nosotros hoy. Son tan importantes que no estaríamos aquí de no haber sido por ellos. Es más, la respuesta a quiénes somos se encuentra en esas esculturas, y en lo que representan cada una, esperando.

LA IMPACTANTE FOTO DE SHANGHAI ( y 2)


Una nueva forma de ver el mundo. En la "gigafotografía"

de Shanghai se pueden apreciar los detalles más

insignificantes (clic para ampliar)



LA IMPACTANTE FOTO DE SHANGHAI

Es otra forma de ver el mundo. La panorámica corresponde a Shanghai, una de las aglomeraciones urbanas más pobladas del Planeta. A primera vista, parece una foto sin más. Pero si decimos que ostenta el récord de ser la fotografía digital de mayor definición jamás realizada (272 gigapíxeles), entonces esto ya son palabras mayores.

Es obra del fotógrafo Alfred Zhao que en solo día, desde el amanecer hasta el atardecer, tomó hasta un total de 12.000 imágenes digitales de esa misma vista de la urbe china, con ayuda de una sofisticada cámara que ejecuta todas las operaciones automáticamente. Posteriormente, usó un revolucionario sistema de fotografía conocido como “Gigapan”, la misma tecnología que utiliza la Nasa en sus robots que están explorando el planeta Marte. En un complejo trabajo que le llevó varios meses, Zhao consiguió ensamblar las 12.000 instantáneas en un mosaico hasta formar una sola imagen de una definición extrema. Es la misma panorámica que podemos contemplar ahora, pero que contiene almacenada una cantidad impresionante de información. Lo más asombroso de todo llega cuando se explora la “gigafoto” original con un ulta-zoom digital, algo así como un “microscopio” de acercamiento, en un ordenador. Entonces surge, como por arte de magia, el portento. Ampliando lo suficiente la imagen entramos de lleno en un universo de lo no directamente visible, llegando a distinguir infinidad de detalles urbanos como, por citar algunos, una paloma en un tejado, un obrero de la construcción perdido en la lejanía, el zapato de una mujer que camina por la calle, las numeraciones de los portales e incluso las matrículas de los automóviles. El nivel de detalle es tan fascinante que fotos como ésta hacen cierto el refrán de encontrar una aguja en un pajar. Estamos viendo una ciudad como nunca antes se había visto. ¿Está naciendo ante nuestros ojos una nueva Era de la fotografía?

domingo, 3 de abril de 2011

LOS BUDAS GIGANTES DE BAMIYAN ESTABAN BRILLANTEMENTE COLOREADOS

Salen a la luz los secretos de las impresionantes estatuas destruidas por los talibanes en 1991



Acantilado en el valle de Bamiyan, en una imagen


de 1933 (Foto: Maynard Owen Williams


Estado actual de la zona (Foto: Mark Schlegel)


El buda de 55 metros, a la izquierda, y tras su


destrucción por los talibanes


Apareciencia de los coloridos ropajes de los budas a


finales del siglo X (Foto: Arnold Metzinger)



La indignación en todo el mundo fue muy grande cuando, hace diez años, los talibanes fueron presa de otra locura de su fanatismo colectivo. Las estatuas de los dos Budas gigantes de Bamiyan, reconocidas por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, fueron completamente destruidas, después de sobrevivir casi intactas durante 1.500 años. Ese grupo extremista islámico, que gobernó Afganistán desde 1996 hasta que fue derrocado a finales de 2001, consideró que las estatuas eran ídolos, y por tanto contrarias al Corán, y fueron hechas añicos con dinamita y disparos desde tanques.


Los monumentales Budas, de 55 y 37 metros de altura, tallados en la pared de un acantilado en el valle de Bāmiyān, en Afganistán central, situado al noroeste de Kabul, fueron hasta el siglo X el centro de uno de los monasterios budistas más grandes del mundo. Lo más probable es que las esculturas se construyeran en los siglos V o VI. Bamiyan fue nudo de comunicación de caravanas de la legendaria Ruta de la Seda, que uníó China e India. Allí se establecieron varios monasterios budistas, y sirvió como vía de intercambio cultural y religioso. Los miles de monjes budistas de los monasterios vivían como ermitaños en pequeñas cuevas excavadas en los acantilados de Bamiyan. Muchos de estos monjes embellecieron sus cuevas con estatuas religiosas y con frescos coloreados.


Desde hace años, expertos alemanes intentan recomponer las estatuas fragmentadas cual si fueran un enorme rompecabezas, Restauradores de la Universidad Técnica de Munich han analizado cientos de fragmentos de las estatuas y han descubierto que, originalmente, no eran del color de la piedra, sino que estaban brillantemente coloreados. Habían sido pintadas en colores como el rojo, el blanco y el azul. Además, han conseguido fijar, por primera vez y de forma fiable, la época de su creación, que sitúan entre los años 544 al 595 para el buda pequeño, mientras que mayor se construyó entre los años 591 al 644. Los investigadores asimismo han quedado impresionados por su brillante método de construcción.


Los budas «tenían un aspecto de intenso colorido», dice el Erwin Emmerling, responsable del equipo de restauración. Han comprobado que las estatuas fueron repintadas varias veces, posiblemente porque los colores perdían su intensidad. Los ropajes exteriores, los Sangati, resplandecían por la parte interior en azul oscuro, por la parte superior en rosa y, más tarde, en un naranja claro. En una fase posterior se pintó el mayor de los budas en rojo y el pequeño en color blanco; la parte interior de los ropajes se reparó con un azul claro. La reconstrucción gráfica de los investigadores confirma las viejas tradiciones transmitidas: Ya en fuentes escritas del siglo XI se hablaba de un buda rojo y otro de un blanco lunar. Las demás partes de las figuras tenían, posiblemente, una primera capa o imprimación blanca pero no se puede documentar de forma fehaciente.


Los investigadores también creen que las estatuas se obtuvieron horadando el acantilado. Sin embargo, la piel exterior con las ondulantes vestimentas fue construida por los obreros con barro que se aplicó en dos o tres capas. «Los restos muestran una destreza sorprendente. “Son superficies lisas, perfectas, una calidad que solamente poseen materiales tratados con fuego, como la porcelana», explica Emmerling. Los restauradores encontraron en el barro paja y paja cortada que absorben la humedad, pelo animal que confiere al revoque una estabilidad como si fuera fibra de vidrio, así como cuarzo y otros aditivos. Las capas interiores de revoque se mantuvieron fijas mediante cuerdas. Así crearon los antiguos operarios capas increíblemente gruesas de hasta 8 centímetros. «Algunas partes resistieron incluso la voladura», afirma sorprendido Emmerling.